sábado, 7 de febrero de 2009

ANALISIS COMENTARIO - 3

Anónimo dijo: "Después hablas de la "flexibilización" del mercado laboral, pero ese "palabro" provoca ciertas inquietudes porque, por ejemplo, desde el sector sindical se considera un eufemismo para lo que ellos creen que es "abaratar el despido", lo que a juicio de los sindicatos mayoritarios, desprotege al trabajador".

La flexibilización del mercado laboral es lo que es, otra cosa es la utilización política y sindical que se haga del término. Las medidas derivadas de esta flexibilidad son, además del abaratamiento del despido y de la contratación, la variedad de contratos (a tiempo parcial, temporales, contratos de agencia), la libertad de horarios, la libertad de negociación entre empresas y trabajadores, retraso en la edad de jubilación, sistemas eficientes de recolocación de trabajadores, fomento de la formación, medidas de apoyo para que los grupos más desfavorecidos encuentren trabajo, y por supuesto cubrir los periodos de paro de los trabajadores por parte del estado. Todo esto permite que haya más personas que puedan conciliar vida familiar y laboral, más prestaciones en las situaciones de paro, más posibilidades de encontrar empleo. Varios ejemplos aquí en Europa: Holanda, Dinamarca y Austria, pese a la crisis, mantienen tasas de paro por debajo del 4%. Ellos tienen sistemas que combinan la flexibilidad con la seguridad. Si se mantiene la actividad y el empleo, todo el gasto público que se ha destinado a este modelo tiene un rendimiento para el país y evita otra serie de gastos del estado.
Es curioso, porque la primera vez que leí la palabra “flexiseguridad” fue en las ponencias económicas del Partido Popular de los pasados congresos, y pensé que simplemente era un eufemismo, pero después he descubierto que no, es un concepto exitoso y contrastado.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Parece un buen critero ese de la "flexiseguridad".

No obstante, ¿se ve a los sindicatos actualmente, ya no en las calles, sino alzando, aunque fuera un poco, la voz ante la sangría de trabajadores en paro y la irresponsabilidad del gobierno actual?

No.

¿Su comportamiento hubiera sido igual con un gobierno de otro "color"?

En fin... dejaré la respuesta a la conciencia de cada uno, pero eso demuestra lo poco que protegen supuestos sindicatos -¡ojo, no digo que todos!- al trabajador, y que sus intereses son "otros" muy distintos.

Y, por eso, ante la flexibilidad laboral que ellos entienden como abaratamiento del despido no darán su brazo a torcer y no creo que jamás se sumen a ese tipo de propuestas que considerarán tan "neoliberales".

P.S.: Si aún siguiera Fidalgo en CCOO podría albergarse alguna esperanza de sensatez, igual que la tuvo Nicolás Redondo en su momento enfrentándose al entonces todopoderoso González. Pero, sinceramente y sin querer llevarme por el pesimismo, tampoco caeré en el infludo del peligroso optimismo antropológico de ZP, y creo que vamos a peor, vamos para atrás, máxime si lo comparamos con las dos brillantes legislaturas de Aznar. Los hechos y la historia acaba poniendo a cada uno en su sitio, aunque la propaganda y la manipulación a veces intente impedirlo.

Todas las medidas que propones serían bastante positivas, aunque ya digo que echarían para atrás a más de uno, por ejemplo, eso de "sistemas eficientes de recolocación de trabajadores" ahuyentaría a cualquier socialista considerando que es una forma muy sutil de abusar de trabajadores no cualificados o recolocaciones coercitivas que limitan la voluntad del trabajador. Ya sé que puede parecer una estupidez, pero propuestas como esas salidas del PP no será bien vistas por esa ente denominado "dialogo social" donde sindicatos y políticos de izquierda componen una gran parte.

Por lo demás, totalmente de acuerdo.

Un cordial saludo.

Miguel A. Paniagua dijo...

El partido popular, si cree que tiene soluciones a los problemas de España, debe intentar comunicarlas y convencer a los ciudadanos. Debe luchar por ellas y no pensar que será difícil, que los sindicatos estará en contra, que la prensa estará en contra,... Todo se puede conseguir, sólo hay que poner el empeño suficiente.