Todavía no estaban todos los datos de las resoluciones de la Unión, aunque ya se atisbaba la decisión que iban a tomar. No sólo un fondo europeo de apoyo a países con problemas de 750.000 euros, de los cuales aporta el FMI 250.000, sino que el BCE vuelve a abrir la espita de la liquidez para los bancos, nuevas subastas a 3 y 6 meses y compra masiva de deuda pública de países europeos.
Y los malvados especuladores actuaron como se esperaba, deshaciendo posiciones cortas y haciendo subir la bolsa española como nunca en su historia. Tampoco me extraña, porque la situación es la más tremenda desde su creación.
Ahora solo falta consolidar que todas esas medidas vengan acompañadas por esfuerzos de los gobiernos para controlar las cuentas públicas y evitar los riesgos de default que parecían inminentes.
El euro también repuntó con fuerza aunque hoy se ha deshinchado, como es lógico, los problemas de Europa tardarán en desaparecer. Pero al menos, el pánico ha desaparecido.
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