viernes, 24 de diciembre de 2010

PAPA NOEL

Este año Papá Noel viene de China. La segunda potencia mundial actualmente (ha sobrepasado a Alemania y Japón en esta crisis) es la que va a marcar los acontecimientos de los próximos años.

El tigre ha despertado. El conflicto coreano, lo resolverá China. El problema de la deuda europea, lo va a resolver también, va a participar en los rescates de Grecia e Irlanda, ha llegado a un acuerdo con Portugal para comprar su deuda soberana y si hace falta con España, Bélgica o Italia también vendrán al quite.

Está creciendo a un ritmo del 10% anual, controlando la inflación, con endeudamiento y déficit escaso, y sobre todo con un potencial impresionante.

Como dijo Confucio "Los vicios vienen como pasajeros, nos visitan como huéspedes y se quedan como amos". Esta es nuestra querida sociedad occidental. Nos ayudan a sobrevivir con ellos, pero debemos cambiar, debemos replantearnos nuestra forma de vida.

Deseo que paseis unos días muy felices en compañía de los vuestros. ¡Féliz Navidad!. Celebramos el nacimiento de un símbolo de la concordia, la paz, la solidaridad y la fe. Valores que necesitamos en estos tiempos oscuros.

6 comentarios:

Jorge Castrillejo dijo...

Espero que los cambios que pides no sean que nos “achinemos”, es decir, comunismo. Feliz Navidad.

Miguel A. Paniagua dijo...

Quizá haya sido un error por mi parte, mezclar nuestros excesos con los datos de China, no era para comparar. Quería destacar los dos sucesos económicos más relevantes de esta época. Soy bastante liberal en materia económica, pero no dogmático.
Por ejemplo, en un país como China que comienza a crecer desmesuradamente, un ferreo control estatal puede ser muy positivo.
En un país muy desarrollado, es necesario que el Estado evite los excesos de los mercados, véase el mercado inmobiliario español o la crisis financiera americana.

Jorge Castrillejo dijo...

No termino de visualizar los conceptos “bastante liberal”, “liberal doctrinario”. Y por supuesto que no estoy de acuerdo en que hay ocasiones en que una dictadura es buena o necesaria, nunca lo es y si China está desarrollándose es a pesar del gobierno.

Por otro lado la crisis inmobiliaria no ha venido por que fuese un mercado desregulado, sino porque el dinero era tan barato y abundante que se lo han dado a aquellos que no tenían capacidad de devolverlo. Es más, el gran problema del mercado inmobiliario es la poca libertad que hay para construir.

Miguel A. Paniagua dijo...

Soy liberal en materia económica, pero no dogmático (entendiendo por dogma la acepción de la RAE "proposición que se asienta por firme y cierta y como principio innegable de una ciencia"). Considero importante la regulación del Estado y de los organismos Internacionales. Además, hay situaciones que el mercado no es capaz de resolver, (p.e. el monopolio y el oligopolio).
Sobre lo de China, no hablo de dictadura, hablo de control por parte del Estado en materia económica. Está funcionando en China y funcionó en Chile con dos dictaduras de signo contrario. Y ejemplos contrarios, son la dictadura española y la soviética, que no funcionaron en absoluto en materia económica.
Que haya un control estatal de la economía no significa que deba haber un control político y un recorte de libertades: estoy totalmente en contra de esta situación, lo cual me resulta obvio.
Mercado inmobiliario español: el origen, tienes razón, es la escasez y la especulación con el suelo. Pero con un modelo distinto, habríamos llegado antes o después al mismo destino, ya que habíamos puesto todos "los huevos" del crecimiento en la misma cesta, el sector de la construcción. Todos los excesos a nivel de demanda, de oferta y de financiación, no tienen nada que ver con el origen. Y se podrían haber resuelto con una intervención del estado.

Jorge Castrillejo dijo...

Entiendo la definición de dogma y dogmático pero precisamente si algo tiene el liberalismo es que es contrario al dogma. Es la ideología que se basa en la libertad individual y no se sustenta en ningún dogma. Yo suelo decir que los liberales somos los únicos que siempre tenemos en cuenta la posibilidad de estar equivocados. Sinceramente no sé quien puede ser un liberal dogmático, igual que no sé quien puede ser un nacionalista liberal.

Tampoco entiendo que se pueda ser liberal en lo económico y no en política.

El liberalismo, al menos tal y como yo lo concibo, no quiere la supresión del Estado, eso es lo que pide el anarquismo. Si no un Estado lo más pequeño posible, que cumpla el principio de seguridad y ayude al desarrollo de la libertad individual.

“Mercado inmobiliario español: el origen, tienes razón, es la escasez y la especulación con el suelo. Pero con un modelo distinto, habríamos llegado antes o después al mismo destino, ya que habíamos puesto todos "los huevos" del crecimiento en la misma cesta, el sector de la construcción. Todos los excesos a nivel de demanda, de oferta y de financiación, no tienen nada que ver con el origen. Y se podrían haber resuelto con una intervención del estado.” Es decir, que el Estado nos diga donde tenemos que invertir y como hacerlo. Eso es planificación y lo demás gaitas gallegas.

Un saludo y me voy a mi blog a romper una lanza por ti.

Miguel A. Paniagua dijo...

Jorge, yo no he dicho que no sea liberal en política, estábamos solamente hablando de economía.
En cuanto al dogma. es exactamente eso: tú dices que el Estado debe intervenir muy poco, y yo también, pero analizo algunas situaciones y creo que en esas, debe tener una intervención mayor. Porque no soy dogmático.
En lo del mercado inmobiliario, no es planificación, sino controlar excesos. Y te he puesto dos ejemplos quizá más claros, un libre mercado que acaba en un monopolio u oligopolio.