domingo, 22 de enero de 2012

¿QUÉ RECORTAMOS?

Dos antecedentes debemos tener en cuenta antes de tomar la decisión: el importe del déficit que supera el 8% con una previsión del 6% hasta hace un mes (supone recortar más de 20.000 mill. más de lo previsto). El compromiso con la Unión Europea, las medidas conjuntas que se están acometiendo entre todos y el riesgo de desmoronamiento de la moneda única que ha existido y que sigue vigente aún.

No hay más opciones: debemos recortar alrededor de 40.000 mill. de euros en España en 2012.

Además nuestro país va a entrar en recesión, tenemos una altísima tasa de paro, nuestro endeudamiento es de los más altos del mundo, el sistema financiero está tocado y tenemos un bajo índice de competitividad.

Mezclamos todos estos ingredientes y debemos tomar una decisión. Ésta debe ser rápida y contundente. Y tiene que intentar apoyar el crecimiento, la contratación, el desapalancamiento público y privado, mejorar la competitividad y aportar la confianza interna y externa necesaria. Difícil, ¿no?

En primer lugar no podemos recortar de un solo capítulo los 40.000 mill., porque seguramente no haya ninguno que permita esa reducción y porque afectaría demasiado a la actividad económica. Por lo tanto, debemos hacerlo de la forma más fraccionada posible.
- Reducción de las estructuras administrativas del Estado en casi un 20%. Más un plan de adelgazamiento y optimización de las actividades del sector público (drástica reducción de las empresas y organismos públicos, análisis y optimización de las competencias de las administraciones estatales, autonómicas y locales y control de sus presupuestos y endeudamiento). Y todo esto se va a hacer sin asfixiar económicamente a estas estas administraciones.
- Reducción de un 20% de subvenciones a diversos colectivos (partidos, sindicatos, organizaciones empresariales, etc.).
- Medidas para evitar el fraude fiscal y a la seguridad social (aquí tenemos mucho recorrido y quizá sea la medida más justa de todas).
- Reformas en el mercado laboral que aporten flexibilidad, competitividad y faciliten la contratación laboral.
- Reforma definitiva del sistema financiero para recuperar el mercado de crédito (necesario para el crecimiento económico).

Pero todas estas medidas no van a conseguir el objetivo y obligatoriamente debemos incrementar los impuestos. Debemos escoger aquellos que penalicen lo mínimo posible la actividad, por eso se ha elegido el IRPF y el IBI, y fundamentalmente a las rentas medias-altas y altas. Esta subida va a penalizar fundamentalmente el ahorro y no tanto el consumo.

Otra medida urgente es intentar movilizar de nuevo el mercado de la vivienda (la compraventa y las reformas), que puede aportar muchos recursos a corto plazo y además es uno de los orígenes de la crisis y de la situación actual por la que pasan bancos, familias, administraciones autonómicas y locales y empresas del sector.

Se conjugan medidas temporales con reformas profundas y duraderas. Es posible que se pueda hacer mejor. Peor, ya sabemos que sí.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Qué recortamos?

He leído su artículo, que respeto pero no comparto, y creo que se puede ahorrar muchos millones sin sangrar más a la clase media y baja. Según mi criterio se podría ahorrar en lo siguiente:
1º Combatiendo al máximo la economía sumergida.
2º Investigar y castigar las cuentas en paraisos fiscales.
3º Erradicar la plaga de la corrupción haciendo que los culpables devuelvan lo robado.
4º Exigir a los políticos que sólo cobren un sueldo y paguen impuestos al igual que los demás, algún político tiene hasta 13 sueldos.
5º Reducir el Senado al 20%,ya que el Senado siempre en los plenos está casi vacio.
6º Que los políticos no se suban el sueldo lo que quieran y cuando quieran, como han hecho muchos, alcaldes entre otros.
Creo que con esto bastaría para solucionar la deuda que tenemos, pero siempre es más fácil y mejor que sea el de siempre quien pague.
Y ya para terminar,creo que tan necesario como todo esto, es que el presidente de gobierno nos explique el por qué de su silencio. Va siendo hora de que sepamos por él que es lo que nos espera. Si no hay transparencia no puede haber confianza.
Buenas tardes.

Miguel A. Paniagua dijo...

Gracias por su comentario y su educación (algo que se echa de menos en los comentarios de blogs y redes sociales).
1º Esto es una de las medidas ya aprobadas.
2º Esta medida ya se está llevando a cabo desde el anterior gobierno.
3º Si se está haciendo, desde luego es en silencio.
4º Totalmente de acuerdo, aunque la cantidad ahorrada sería mínima.
5º El Senado, incluso el 100% o una reforma definitiva para que sea un instrumento democrático operativo. Tampoco el ahorro sería muy grande.
6º La rebaja del sueldo de los políticos, tendría una influencia mínima; yo incluso considero que son bajos, pero estoy de acuerdo que debe construirse un sistema objetivo de retribución de los cargos públicos. Además, incluyendo retribución fija y variable.
Con estas medidas que propone Vd., lo siento, pero no conseguiríamos resolver nuestro problema de endeudamiento. Aunque algunas de estas medidas que propone, con modificaciones, aportarían credibilidad al sistema político actual. Esto es muy importante en cualquier momento, y en éstos en los que se está pidiendo un sacrificio extra a los ciudadanos, todavía más.
Por cierto, yo considero que éste lo están soportando fundamentalmente las rentas medias y altas.
Sobre el silencio del Presidente, puede que tenga razón, aunque no lo considero importante, si nos lo comunica la Vicepresidenta lo considero suficiente. Creo que él quiere comunicar todo el conjunto y cuanto esté cerrado lo hará.