CONFIANZA

La importancia de transmitir confianza a los mercados ya la he destacado en muchos comentarios durante esta crisis. Si es importante para la economía en cualquier momento, mucho más cuando estamos en el pozo y queremos salir de él. Sólo la confianza generará el ambiente necesario para incrementar la inversión, el consumo y la creación de empleo.

¿Cómo conseguimos aumentar la confianza?, o mejor, ¿cómo conseguimos implantarla?. Estableciendo una estrategia clara y resuelta. Diseñando medidas y reformas necesarias. Proponiendo objetivos que mejoren la competitividad y la productividad. Y resolviendo los problemas cuanto antes.

Y ¿cómo conseguimos que la confianza no aparezca?. Tomando medidas, sin orden ni concierto, ante la presión inmediata de los mercados. Mintiendo constantemente, proponiendo unas medidas que luego no se toman, o se recortan de forma significativa. Dando bandazos de un lado a otro. Aplazando la resolución de los problemas importantes, como las reformas del mercado laboral y la reforma del sistema financiero. Transmitiendo informaciones a los mercados internacionales que luego deben ser desmentidos. El caso de China de esta semana pasada ha sido dramático.

He apoyado algunas medidas tomadas por este gobierno, en base a esta necesaria confianza, pero su fracaso en este ámbito es palmario. Su incapacidad, su preocupación por intereses que se nos escapan y su dejadez nos han hundido en este hoyo del que tardaremos en poder salir. Hasta mayo de 2012 no habrá un nuevo gobierno, por lo que se aplaza, al menos, hasta el verano de ese año el posible inicio de la recuperación. El daño causado es tan grande, que necesitaremos años para volver a una situación de estabilidad económica. 5 millones de parados son muchos. Demasiadas familias hundidas, demasiadas empresas destrozadas, demasiado sufrimiento.